Fernán González, Castilla y San Pedro de Arlanza  

Durante el siglo X los reinos cristianos luchaban por recuperar el terreno perdido años antes frente a los infieles en la península ibérica. Pero a su vez se tenían que enfrentar a una serie de tramas internas. Una de ellas fue la llevada a cabo por el condado castellano, por aquel entonces perteneciente al reino de León.

Reinos peninsulares año 1200

El condado de Castilla aparece por primera vez documentado en torno al año 800, siendo este más una región que un condado, ya que estaba compuesto por varios condados, las disputas entre el conde castellano y el rey leonés fueron múltiples. La imagen que nos ha llegado del conde es el del ideal de un buen castellano, noble, valiente, audaz; no obstante es apodado como “el buen conde”. Existen varias leyendas sobre el origen del reino de Castilla, entre las más conocidas se encuentra el relato del azor y el caballo:

Fernán se había venido negando a pagar el tributo correspondiente al rey, y este lo reclamó en varias ocasiones, hasta que al final decidió acudir a león a una cacería Fernán González se presento ante el rey de León montando un caballo de gran belleza (que había ganado a los moros) llevando un azor igualmente bello para practicar la cetrería. El rey quedó prendado de ambos animales e insistió en comprárselos a Fernán González.

Tras el acuerdo, como el rey no llevara el dinero encima, le prometió al castellano que, por cada día que pasara, el rey doblaría el precio acordado. Pasado un tiempo, Fernán González le recordó al rey su deuda. Este hizo cuentas y se dio cuenta que la cantidad que adeudaba al conde era tan astronómica que no podía pagarla.

"¿Qué puedo ofrecerte a cambio?", preguntó el rey.

"La independencia de Castilla", respondió Fernán González. "

Sepulcro de Fernán González, protegido por pendón de Castilla

La aparición del reino castellano esta ligado a la región conocida como las merindades de castilla, al norte de la provincia de Burgos. Al propio nacimiento del reino esta unida la historia de un enigmático monasterio actualmente en ruinas, San pedro de Arlanza, en el cual se dice que un caballero templario jugó una partida de ajedrez contra una figura de galas negras y mirada seductora, el mismísimo diablo. Aún se conserva el suelo baldosado en damero negro y blanco en el que se debiera jugar tal partida.

El monasterio de Arlanza fue fundado en el año 912, y narra una leyenda que el lugar elegido fue donde Fernán González, por entonces hijo del Conde de Castilla, Gonzalo Fernández, tropezó y fue a parar a una cueva en la que vivía un ermitaño. Allí mandó levantar una capilla dedicada a San Pelayo (así se llamaba el ermitaño) y más tarde fue ampliada hasta convertirse en un amplio monasterio encomendado a San Pedro. El monasterio de San Pedro de Arlanza es pieza clave en el nacimiento de la lengua castellana.

Monasterio de San Pedro de Arlanza